Una familia de la cabecera departamental sufrió en el mediodía del sábado las características de un secuestro virtual.
Estas nuevas modalidades delictivas, comenzaron a romper la paz y tranquilidad que se vivía en las ciudades y pueblos del interior provincial, en la ocasión le tocó vivir a una familia de trabajadores de un barrio de la ciudad de Chepes; los cuales debieron sufrir por varias horas, la desesperación y la disyuntiva, al ser notificados por una llamada telefónica del secuestro del hombre de la casa.
La familia Neira-Elizondo, con residencia en el barrio 71 viviendas de esta cabecera, tuvo que soportar horas de mucha angustia cuando le avisaron a través de una llamada al celular de la esposa, en primer término de un accidente de Danilo Neira, el padre de familia, y posteriormente del secuestro del mismo.
Raquel Elizondo la esposa, en diálogo con los medios, refirió con detalle los momentos de incertidumbre y temor que le tocó vivir cuando recibió una llamada de un número con característica de la provincia de Córdoba, en la comunicación, en primera instancia“me comunican que mi esposo Danilo había tenido un accidente pero que ya estaba siendo atendido por los "paramédicos" es ahí donde la mujer pregunta el estado, las condiciones físicas de su marido, tranquilizándola los delincuentes lo ponen al teléfono al supuesto esposo accidentado para que le diga a la mujer que se encontraba bien.
Elizondo, relató que “noté la voz un poco extraña pero pensé que podía tratarse del momento y la situación por la cual estaba atravesando Danilo y alcancé a escuchar que me decía con voz rara, ‘no le des nada a estos hijos de p…”, pero casi de inmediato “tomó de nuevo el celular la persona de sexo masculino con tonada cordobesa para decirme que no era un accidente sino que se trataba de un secuestro, y que le entregará todo lo que tenía en la vivienda, caso contrario "lo hacían boleta".
A partir de ese momento la angustia se apoderó de la mujer que se encontraba en su casa acompañada por sus dos hijos, una nena de 12 y un bebe de 2 años, pero contó con el acompañamiento de varios vecinos que en forma inmediata se hicieron eco de la situación que atravesaba la señora.
A partir de ese momento comenzaron a transcurrir momentos de mucha angustia, ya que la señora Elizondo, relató que “no contaba con dinero y que solo podía juntar mil pesos; a lo que los delincuentes le respondieron que estaba bien y que hiciera lo que ellos le pedían; que se dirigiera a un kiosco cercano para concretar el pago y que no dejara de atender el teléfono porque si no le cortarían los dedos a Danilo”.
La mujer atinó a buscar ayuda en los vecinos, que uno de ellos puso sobre aviso a la policía que en forma inmediata se hicieron presentes en el lugar con el comisario Roberto Moyano, jefe de la Unidad Regional VI, a la cabeza, quien luego de tomar contacto con la señora ordenó que se retiren todos los efectivos y patrullas del domicilio para no llamar la atención, quedándose él solamente con la dueña de casa y los niños en la vivienda.
El esposo de la señora Elizondo, cumple funciones como supervisor en la empresa ARCOR que tiene una sucursal en la ciudad, el horario de ingreso al comercio es a las 8 hs aproximadamente y el día sábado culmina su tarea a las 12 hs, y como lo hace habitualmente al cerrar el negocio lleva al encargado en su vehículo a la terminal de ómnibus, para que aborde un micro, ya que reside en la capital riojana, cosa que realizó como lo hace todos los sábados.
Desde el momento de la primera comunicación que recibió la mujer, el teléfono del esposo, presuntamente secuestrado, cuando intentaban llamarlo daba como apagado o fuera del área de cobertura, lo que angustiaba mucho más a la familia.
Pero “gracias a Dios” y a la fe que proclamaba la mujer permanentemente, pasadas las 13 horas, se hizo presente en la casa el marido, sorprendido, sin saber que estaba pasando y sin entender nada de lo que le estaban relatando.
Neyra, ante el comisario Moyano que se encontraba en el domicilio, contó que salió de trabajar a la hora de siempre, hizo lo que hace todos los sábados y luego fue a visitar a su mamá que vive en un barrio cercano, donde se demoró arreglando un artefacto, lo que le llamó la atención “es que no tenía señal en mi teléfono, por lo que no me pude comunicar para avisar” agregando “es más todavía no tengo señal, me sorprendió por que verifiqué otros teléfonos de la misma empresa y sí tenían señal, me pareció raro” agregando “jamás imaginé una cosa así”.
Finalmente, el jefe de la regional VI, comisario Moyano, dialogó con la prensa expresando “esto que ha pasado nos pone sobre aviso de que tenemos que estar mucho más atentos que antes ahora están sucediendo cosas que antes nunca habían pasado” al respecto de cómo sigue este hecho, agregó “obviamente que seguiremos investigando, tenemos varias cosas para averiguar, esto puede volver a repetirse”. F: el cronista.
Estas nuevas modalidades delictivas, comenzaron a romper la paz y tranquilidad que se vivía en las ciudades y pueblos del interior provincial, en la ocasión le tocó vivir a una familia de trabajadores de un barrio de la ciudad de Chepes; los cuales debieron sufrir por varias horas, la desesperación y la disyuntiva, al ser notificados por una llamada telefónica del secuestro del hombre de la casa.
La familia Neira-Elizondo, con residencia en el barrio 71 viviendas de esta cabecera, tuvo que soportar horas de mucha angustia cuando le avisaron a través de una llamada al celular de la esposa, en primer término de un accidente de Danilo Neira, el padre de familia, y posteriormente del secuestro del mismo.
Raquel Elizondo la esposa, en diálogo con los medios, refirió con detalle los momentos de incertidumbre y temor que le tocó vivir cuando recibió una llamada de un número con característica de la provincia de Córdoba, en la comunicación, en primera instancia“me comunican que mi esposo Danilo había tenido un accidente pero que ya estaba siendo atendido por los "paramédicos" es ahí donde la mujer pregunta el estado, las condiciones físicas de su marido, tranquilizándola los delincuentes lo ponen al teléfono al supuesto esposo accidentado para que le diga a la mujer que se encontraba bien.
Elizondo, relató que “noté la voz un poco extraña pero pensé que podía tratarse del momento y la situación por la cual estaba atravesando Danilo y alcancé a escuchar que me decía con voz rara, ‘no le des nada a estos hijos de p…”, pero casi de inmediato “tomó de nuevo el celular la persona de sexo masculino con tonada cordobesa para decirme que no era un accidente sino que se trataba de un secuestro, y que le entregará todo lo que tenía en la vivienda, caso contrario "lo hacían boleta".
A partir de ese momento la angustia se apoderó de la mujer que se encontraba en su casa acompañada por sus dos hijos, una nena de 12 y un bebe de 2 años, pero contó con el acompañamiento de varios vecinos que en forma inmediata se hicieron eco de la situación que atravesaba la señora.
A partir de ese momento comenzaron a transcurrir momentos de mucha angustia, ya que la señora Elizondo, relató que “no contaba con dinero y que solo podía juntar mil pesos; a lo que los delincuentes le respondieron que estaba bien y que hiciera lo que ellos le pedían; que se dirigiera a un kiosco cercano para concretar el pago y que no dejara de atender el teléfono porque si no le cortarían los dedos a Danilo”.
La mujer atinó a buscar ayuda en los vecinos, que uno de ellos puso sobre aviso a la policía que en forma inmediata se hicieron presentes en el lugar con el comisario Roberto Moyano, jefe de la Unidad Regional VI, a la cabeza, quien luego de tomar contacto con la señora ordenó que se retiren todos los efectivos y patrullas del domicilio para no llamar la atención, quedándose él solamente con la dueña de casa y los niños en la vivienda.
El esposo de la señora Elizondo, cumple funciones como supervisor en la empresa ARCOR que tiene una sucursal en la ciudad, el horario de ingreso al comercio es a las 8 hs aproximadamente y el día sábado culmina su tarea a las 12 hs, y como lo hace habitualmente al cerrar el negocio lleva al encargado en su vehículo a la terminal de ómnibus, para que aborde un micro, ya que reside en la capital riojana, cosa que realizó como lo hace todos los sábados.
Desde el momento de la primera comunicación que recibió la mujer, el teléfono del esposo, presuntamente secuestrado, cuando intentaban llamarlo daba como apagado o fuera del área de cobertura, lo que angustiaba mucho más a la familia.
Pero “gracias a Dios” y a la fe que proclamaba la mujer permanentemente, pasadas las 13 horas, se hizo presente en la casa el marido, sorprendido, sin saber que estaba pasando y sin entender nada de lo que le estaban relatando.
Neyra, ante el comisario Moyano que se encontraba en el domicilio, contó que salió de trabajar a la hora de siempre, hizo lo que hace todos los sábados y luego fue a visitar a su mamá que vive en un barrio cercano, donde se demoró arreglando un artefacto, lo que le llamó la atención “es que no tenía señal en mi teléfono, por lo que no me pude comunicar para avisar” agregando “es más todavía no tengo señal, me sorprendió por que verifiqué otros teléfonos de la misma empresa y sí tenían señal, me pareció raro” agregando “jamás imaginé una cosa así”.
Finalmente, el jefe de la regional VI, comisario Moyano, dialogó con la prensa expresando “esto que ha pasado nos pone sobre aviso de que tenemos que estar mucho más atentos que antes ahora están sucediendo cosas que antes nunca habían pasado” al respecto de cómo sigue este hecho, agregó “obviamente que seguiremos investigando, tenemos varias cosas para averiguar, esto puede volver a repetirse”. F: el cronista.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deben acotarse al tema de discusión. Se apreciará la brevedad y claridad de los textos y el buen uso del lenguaje.
LosLLanosOnline.com se reserva el derecho de eliminar aquellos comentarios injuriantes, discriminadores o contrarios a las leyes de la República Argentina.