La
provincia de La Rioja,
pese a no contar desde diciembre último con los beneficios que establecía el
régimen de Promoción Industrial creado por la ley 22.021 y sus sucesivas
modificaciones como la del año 95 de reasignación de cupos fiscales, no solo
mantiene los niveles de empleo de las empresas radicadas en el parque
industrial, sino que paulatinamente y con el acompañamiento de situaciones
coyunturales favorables, ha ido incrementando progresivamente ese índice.
Textiles, calzado, gráficos y alimentos son los puntales de esta tendencia que
en los últimos meses marcó alrededor de cien nuevos operarios.
La Promoción Industrial,
creada por ley en el año 1973 con el acta de Reparación Histórica que favorecía
a las provincias de La Rioja,
San Juan, San Luis y Catamarca, fue un instrumento de desarrollo muy importante
para estas provincias, pero las empresas, tras la culminación de este régimen,
decidieron seguir apostando por permanecer en estas regiones y de a poco van
superando diferentes situaciones de mercado, en algunos casos de la mano del
propio Estado provincial que las acompaña en casos de crisis graves.
Un estudio realizado desde la Secretaría de Trabajo,
dependiente del Ministerio de Gobierno, revela que la gran mayoría de las
empresas, salvo circunstancias especiales y puntuales, han ido subiendo el
número de puestos de trabajo que poseen.
Crear un empleo directo significa
un esfuerzo importante de inversiones que se ubica en el orden de los 7 mil
pesos mensuales, como mínimo, de lo que cuesta mantener a un trabajador en
blanco y se incrementa de acuerdo al sector y a cada empresa en particular.
Estos niveles de salario pueden superar los 15 mil pesos.
Esta suba en el empleo se
motoriza fundamentalmente sobre los principales sectores industriales de la
provincia, como el textil, el calzado, gráficos y agroalimentarios.
En el rubro alimentos se observa
una suba del empleo, que hace que el sector, impulsado por situaciones
estacionales supere ya los 350 puestos de trabajo y muestre una marcada
estabilidad en las fuentes laborales.
En lo que hace al rubro
papelería, que incluye el sector comercial, escolar e industrial, los puestos
de trabajo también muestran un crecimiento importante y llegan ya a los 400.
En los plásticos y juguetes, el
nivel de empleo se mantiene estable, en los 60 empleos, al igual que en otros
sectores industriales como cosméticos (casi 120 empleos), metalmecánica (35
empleos).
En el sector de producción de
film de polietileno y envases de termoformado, las empresas han registrado una
suba paulatina del nivel de empleo, que las lleva a contar con casi 300 puestos
de trabajo.
En cuanto al rubro textil, el más
importante con el que cuenta la provincia de La Rioja, al tener más del 30%
de la capacidad instalada del país en este aspecto en la provincia, las
empresas han ido, de acuerdo a las variaciones del mercado, manteniendo un
comportamiento estable en lo que respecta a los índices de empleo.
De todos modos, se destaca una
constante tendencia a ir subiendo paulatinamente los puestos de trabajo del
sector en sus diferentes etapas de la cadena de valor textil, como hilandería,
confecciones, teñiduría, corte y confección, entre otros, lo que hace que el
sector aporte más de 2.500 empleos directos con la importancia que de ello
deriva.
En el rubro farmacéutico, el
empleo se mantiene estable en más de 120 puestos de trabajo, al igual que la
fabricación de medidores de gas y energía eléctrica, con 70 puestos de trabajo,
lo mismo que sectores más pequeños como la fabricación de fotocopiadoras (47
puestos de trabajo), de muebles (60 empleos), servicios a la industria, o
incluso otros más importantes como la fabricación de envases que supera los 247
empleos.
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